A las puertas del paraíso....

Estábamos juntos, relajados, disfrutando de la mezcla de colores, del negro volcánico que enmarca el mar, en la playa de Janubio.
Nos sorprendimos del mar embravecido, que hacía explotar su furia contra las piedras de la orilla. Las olas se arremolinaban con fuerza, y no se veía ni una barca en el mar. ¿Te imaginas meterte ahora? Seguro que el mar te mueve como un guiñapo...
La tarde caía blandamente, y dejamos pasar el tiempo en uno de nuestros sitios favoritos, junto al mar.
Volvimos a casa, y una procesión de sirenas y luces naranjas y azules corrían raudos hacia el norte...
Al día siguiente nos enteramos de la noticia.
Una patera naufragó junto a la playa de lo cocoteros, cuando ya divisaban su ansiado paraíso europeo. Sólo seis supervivientes, y al menos veinticinco fallecidos. Las imágenes desgarran el alma del más curtido, cuerpos de menores sacados de las aguas, una catástrofe a las puertas de casa.
Los inmigrantes llevaban 20 horas de travesía, se habían puesto varias capas de ropa y, cuando su patera volcó, sus cuerpos se convirtieron en piedras pesadas que se hundían en el mar. Tan sólo la actuación de dos surfistas Cristian Hunt y Johny Camarasa evitó que todos murieran. Cristhian Hunt, el surfista que rescató a los únicos supervivientes de la patera que naufragó en Lanzarote, ha explicado que al llegar al lugar de la tragedia vio un panorama "tétrico", con inmigrantes "flotando a la deriva y una barca con varias personas agarradas pidiendo auxilio".
Sostiene que "todos se habrían ido al fondo, seguro, si no se agarran a la barca". Hunt, uruguayo de nacimiento y vecino del pueblo de Los Cocoteros, que vive a pocos metros del lugar donde volcó la patera, ha explicado que fue su esposa quien le avisó de lo que pasaba y le pidió que se dirigiera al lugar por si podía hacer algo por los náufragos.El vecino de Los Cocoteros, que se ha convertido en un héroe por el salvamento de los únicos supervivientes de la tragedia, ha relatado que con ayuda de su tabla de surf fue trasladando a los inmigrantes "uno a uno" desde la barca hasta la orilla. "Todos ellos estaban morados, con síntomas de hipotermia y casi entregados", ha relatado.
"Con la ayuda de la gente que fue llegando, los fuimos subiendo a todos con un salvavidas atado a un cabo porque la marea estaba muy dura y el oleaje dificultó mucho el rescate", ha dicho el surfista.
Hunt ha asegurado que siente una gran satisfacción de haber rescatado con vida a seis inmigrantes, "los que pudimos", y considera que su actuación no tiene nada de particular. "Lo más lógico es que si ves que unas personas se están ahogando delante de ti pues que trates de salvarlos", ha afirmado. El surfista ha señalado que uno de los momentos que no olvidará jamás fue cuando un niño de 14 años que se encontraba agarrado a la popa de la patera le gritó en francés "que me llevara primero a un niño" menor que él.
Mi humilde homenaje a todos los que han colaborado en el rescate.
Y una pequeña reflexión: ¿Qué mundo estamos creando? No me creo del todo que no tengan ni idea de lo que pasa por aquí. Seguro que hay una televisión con parabólica, cable o lo que sea en Marruecos (parece que la patera salió de Tánger), o en Mali, o cualquier país del África subsahariana de donde partieron los pobres viajeros. Otra cosa es la imagen que se refleja de nuestra sociedad.. tal vez puede más el dorado y el lujo de un supuesto glamour consumista, que los problemas, el paro y la acogida que realmente les esperaba.
¡Vaya puta mierda de mundo, señores! Dibujamos una línea en el suelo, y de un lado hay una país, una patria, un estado nación, un espacio Schengen, o lo que sea, y del otro la miseria, la exclusión y la desesperanza.
Por cierto, he tenido la suerte de ayudar a otros recién llegados, y lo que sorprende de los africanos es su sentido de la familia, de la amistad, y su amplia sonrisa, ... Quizá deberíamos aprender algo, de ellos, la hospitalidad, la esperanza en que algo cambie, y de Hunt y de otros tantos, el valor, y la extraña capacidad de ver el hombre o la mujer que hay más allá de lo negro o blanco de la piel. Y cuidadito con las futuras reformas de la ley de extranjería...